sábado, 13 de abril de 2013

Un viernes.

Ok, estoy sentada en mi sillón habiendo bebido cerveza y rakia (bebida macedónica), después de haber ido a un increíble recital y hay dos personas que no conozco en mi departamento: uno sentado en el almohadón del piso fumando la misma marca de puchos que fumo yo los fines de semana, y otro sentado en una banqueta cerca de la tabla de planchar (que quedó de hoy a la tarde).
Recital: canté, bailé, grité y reí con amigos que son "muy buena onda" y me hicieron pasar un show de casi 4 horas de manera entretenida y sintiendo lo mismo que yo al ver esa banda.
Post- recital: conocí gente nueva, amo conocer personas todo el tiempo: me gusta escucharlos hablar, ver cómo se relacionan, tratar de sacar una conclusión acerca de cómo son y divertirme.
El que fuma puchos tiene un tono de voz bastante agradable, grave, tranquilo y distendido mientras que el otro, ese de la banqueta, se ríe, hace comentarios que a veces no me agradan pero que igualmente me parece simpático porque tiene una risa contagiosa y además es amigo de un amigo (por algo lo eligió como amigo),  y su tono de voz también es tranquilo y relajado, perfecto para caerme bien.
Música,cerveza y más risas. La perfecta combinación para terminar un excelente viernes.

miércoles, 3 de abril de 2013

Se acercó a mi oído y habló con un tono de voz tranquilo y secreto. Me dijo "te quiero" y me quedé callada.