martes, 16 de julio de 2013

Soundtrack VIII.

Solía llegar a su departamento, sacarme los zapatos y sentarme en la silla mientras él abría una botella de cerveza y me invitaba un pucho.
Hablábamos durante horas, nos reíamos bastante y escuchábamos música pero esa noche fue particular.
Mi amigo, su amigo y compañero de departamento, no estaba así que éramos él y yo,  tranquilos, lloviznaba un poco y no hacía frío por lo que la ventana del balcón estaba abierta de par en par.
Habíamos tomado dos botellas de cerveza y los puchos se acumulaban en el cenicero de la mesa del sector "comedor-cocina" (era un monoambiente).
Después de conversar un buen rato, él se levantó, fue hasta la computadora y puso un CD de Soda Stereo, después se sentó a mi lado en la cama y me dio un beso.
Me acuerdo de ver la luz de la mañana entrando por la ventana,del frío de las 6.00 AM, de haberme acurrucado entre sus brazos y de las canciones de Soda Stereo que seguían sonando de fondo, hasta que me dormí.
Otra vez, ya instalado en otro departamento, pasó casi lo mismo, con la excepción que la música de Soda Stereo la había puesto mi amigo, su compañero de departamento, a un volumen considerablemente alto, supongo que para mitigar cualquier sonido.
De nuevo la misma situación: la luz de la mañana temprano entrando por la ventana, el frío, acurrucarme en sus brazos y dormirme, con las canciones de Soda desde el living.
Claramente, cada vez que escucho Soda me acuerdo de él.
Otra banda más que forma parte del soundtrack de mi vida.



1 comentario:

Lu dijo...

Me pasa lo mismo con alguien que conocí hace muchos años. Soda ha marcado muchos amores, ja. Beso, muchachita!